Page 73 - Entes y apariciones entre nosotros

El ambiente empezó a cambiar, se fue el olor, se disipó la penumbra,
pero el doctor tardó un poco en reaccionar, seguía impactado.

Después de unos segundos, se acercó a su amiga, tocó su cuello,
pero no sintió signos vitales. Luego se acercó al muchacho, quien
tenía un aspecto tétrico, de igual manera, ya no estaba vivo. Dicen
que, en la parte de afuera, los vecinos vieron salir a un viejecito
vestido de blanco, triste, ensimismado, moviendo la cabeza, como
lamentando que Julián no le hubiera hecho caso.

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