Page 81 - Una vida dedicada a la enseñanza
P. 81

le había transmitido su amor por la educación. Mayra, siempre
            apasionada por las artes, fundó una pequeña galería en el corazón
            de  Guanajuato,  mientras  que  Mario,  con  su  brillantez  innata,
            había viajado al extranjero para estudiar ingeniería, pero siempre
            regresaba para las festividades más importantes.


            María a menudo organizaba reuniones familiares en su casa, donde
            la risa y las historias llenaban cada rincón. Aunque los tiempos
            habían cambiado y la tecnología formaba parte integral de la vida
            cotidiana, esas reuniones tenían un aire nostálgico. Las leyendas
            de Guanajuato, las mismas que Margarita le contó cuando era niña,
            resonaban en la casa, pero ahora eran contadas con el entusiasmo
            de los nietos de María, quienes habían escuchado las historias de su
            abuela y las compartían con sus propios amigos.


            Una tarde, después de una de estas reuniones, Alberto se acercó
            a María y le tomó la mano. ¿Recuerdas la primera vez que nos
            conocimos en Irapuato?,— preguntó con una sonrisa melancólica.
            María asintió, recordando aquel día soleado en el mercado. Nunca
            imaginé que ese encuentro cambiaría mi vida de tal manera, confesó
            Alberto.


            Juntos, miraron el atardecer, viendo cómo el sol se escondía
            detrás de las colinas de Guanajuato. Era un espectáculo que habían
            presenciado innumerables veces, pero siempre les dejaba con una
            sensación de asombro y gratitud.


            Estoy  orgullosa  de  la  familia  que  hemos  construido,  –murmuró
            María, apretando la mano de Alberto. Y estoy agradecida por todo
            lo que hemos compartido juntos.


            Los días continuaron fluyendo, cada uno trayendo sus propios
            desafíos y alegrías. María, aunque ya no estaba en el aula, seguía
            siendo una maestra en corazón. Se unió a un club de lectura local,
            donde discutía y debatía sobre literatura e historia, con personas
            de todas las edades. También inició un pequeño grupo de teatro




                                                                                 79
   76   77   78   79   80   81   82   83   84   85   86