Page 33 - El magisterio y la vida en verso y prosa
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Otros han habido que juegan con ella y su imagen, cuando le dicen:
Los aretes que le faltan a la luna
los tengo guardados
en el fondo del mar…
Algún cariacontecido, expresó musicalmente:
Quiero escaparme con la vieja luna
en el momento en que la noche muere
cuando se asoma la sonrisa blanca
en la mañana de mi adversidad…
Concluyo este ensayo con una hermosa canción, letra y música de un
querido amigo recién fallecido, Ariel Burgos Ortiz, quien le cantó a su
tierra de adopción, porque él era yucateco, la hermosa isla de Cozumel,
Quintana Roo, describiéndonos la influencia de la luna sobre sus playas.
Luna de Cozumel, que brillas sobre el mar,
que alumbras con tu luz de plata,
las aguas de cristal de este mar tropical
que besa con amor la playa.
Eres novia del mar, cómplice del Palmar
y los enamorados, que vienen a buscar
aquí la intimidad, que no hay en otros lados.
Luna de Cozumel, romántico quinqué,
testigo de incontables noches
en que amantes sin fin vienen a realizar
sus más caros anhelos,
podrán haber más lunas, mas como tú,
ninguna, luna de Cozumel.
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