Page 26 - Un docente preSNTE
P. 26
delante de su escritorio—. Hace un rato estabas nervioso,
luego feliz, más tranquilo cuando me pediste hablar y ahora…,
parece que algo te preocupó demasiado.
—No, no es nada, sólo, recordaba a algunos de mis compañeros
que iniciaron la carrera y no terminaron, es todo, sólo eso.
—Es una pena, pero ocurre en todas las carreras y en todas las
universidades. Pero, no era de eso de lo que querías hablarme,
¿o sí?
No, no era eso. Maestro, primero que nada, quiero agradecerle otra
vez su apoyo y asesoría: las enseñanzas, sus clases, el tiempo para
mi tesis; todo, gracias por todo. Sólo que ahora, después de ver las
prácticas y ya titulado, me queda claro que es y será muy diferente
estar al frente de un grupo que sólo de apoyo. ¿Me podría dar algunos
consejos o tips de la vida real?, ya sabe, de estar frente al grupo.
Se quedó pensando y observándome, pasando su mano derecha
por su barbilla y parecía que mentalmente escogía las palabras
adecuadas. Ya antes habíamos platicado, siempre con temas
referentes a la escuela y el ser docente; sabía que si alguien tenía
la experiencia y que me proporcionaría la ayuda necesaria, sería el
maestro Enríquez.
—Primero que nada, recuerda que no eres su cuate ni su amigo.
Eso debes tenerlo claro siempre, ya estás titulado, tienes
24 años, estás muy joven y puedes confundirte fácilmente
con alguna situación. Las reglas del juego o la manera cómo
impartirás tu clase, debes dejarlo claro desde el principio.
—Reglas del juego, ok, lo tengo, ¿algo más?
—Nada de involucrarte ni con los alumnos ni con sus padres, todo
estrictamente profesional. Olvídate de tandas, pedir dinero,
organizar cooperaciones para lo que sea: no tú, nunca en tu
papel de maestro, a menos claro, que tengas una comisión que
24

