Page 15 - El arte en la educación y los procesos de aprendizaje creativo...

de educación en el arte además de potenciar la expresión de
ideas, emociones y sentimientos, permiten su vinculación con
el pensamiento crítico, la creación externa e interna. Es decir, la
posibilidad de proyectar externamente y de forma estética un
producto que se vincula profundamente al proceso creativo interno
y de autoconocimiento.

Proceso de aprendizaje creativo

Un proceso de aprendizaje creativo sucede cuando de manera
consciente convergen los procesos creativos con los procesos de
aprendizaje. Podríamos aventurarnos a decir que el proceso creativo
guía el camino a recorrer, mientras que el proceso de aprendizaje
consciente permite el autorreconocimiento personal, sin embargo,
la realidad es que ambos procesos confluyen en uno solo.

Un proceso de aprendizaje creativo, es una oportunidad de
relacionarse con un fenómeno de estudio de una forma consciente y
profunda. Permite que el recorrido de exploración del conocimiento
no separe las emociones y sensaciones de la racionalidad. Está
profundamente ligado a la realidad común y cotidiana, en este
sentido, podríamos hablar de un proceso sentipensante que a la vez
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que asume que el primer contacto con el mundo es a través de los
sentidos, no olvida que los procesos racionales están íntimamente
relacionados.

1 Según Alejandro Robayo Corredor (2001), “sentipensar es un concepto que
acuñó el sociólogo colombiano Orlando Fals Borda con el fin de denotar la manera
como ciertos sujetos sociales actúan sin separar la razón de sus emociones.
Originalmente, fue una noción que aprendió de un pescador en la costa colombiana
de El caribe. A pesar de la potencia explicativa de este concepto, no fue elaborado
por el mismo Fals Borda y ha trascendido a ser una idea general cuyas implicaciones
han sido poco analizadas (... ) El sentipensar denota la unidad intrínseca entre
sentir y pensar, lo que implica un giro fundamental con respecto a buena parte
de la tradición filosófica occidental que se desarrolló sobre la idea de que sentir
y pensar eran facultades diferentes. Por el contrario, este concepto nos permite
entender al sentir y al pensar no como dos actividades independientes, sino como
dos momentos de una misma capacidad. Así, sentipensar, es la capacidad para
aprehender impresivamente (por medio de los sentidos) la realidad (p. 46).

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