Page 32 - Un docente preSNTE

—Bueno, sí, es verdad, a todos en la revisión de cuadernos
se les señalan las faltas de ortografía si las tienen y se les
anotan recomendaciones de otras fuentes para reforzar su
aprendizaje, pero, es de acuerdo a su nivel de desempeño; por
ejemplo, las sugerencias para Juan son más de apoyo de cuidar
su ortografía, imagínate, escribir cajón con “g”, como que para
tercero de secundaria ya no va.

—Jajajajaja, ay maestro, ¡no invente!, ¿en serio?, jajajajajaja, qué
bárbaro Juan, y sí lo creo capaz, le digo que pasó la primaria de
noche, jajajajaja.

—Pues, antes de que termine este año escolar, escribirá
correctamente.

—¿Y ese tiempo que se queda después de clase se lo pagan?

—No, de hecho, ni siquiera me querían dar permiso de la dirección
para quedarnos más tiempo; fue por medio de un escrito donde
los padres de los chicos que se quedan ese tiempo autorizaron
y estuvieron de acuerdo, y lo más que podemos quedarnos es
hasta las dos de la tarde.

—¿Y entonces por qué lo hace?, ¿qué gana con eso?

—Mira, a veces, no todo se trata de dinero. Además, estoy muy
contento y agradecido con este trabajo. En el anterior ganaba
un poco más, sí, pero trabajaba todo el día y también los fines
de semana, prácticamente, era lo único que hacía en la vida:
estar en el trabajo. Ahora, tengo tiempo para estar en casa,
descansar, preparar clase, visitar a mi familia, pues no viven
aquí en este estado. Es una forma de agradecerle a la vida por
este trabajo, el cual tiene muchas, demasiadas ventajas.

—Pensé que todos los trabajos eran iguales, o que aparte de estar
aquí en la mañana, trabajaba en otra escuela en la tarde. Mi
mamá trabaja todo el día, sale antes de que entre a la escuela y
llega ya en la noche.

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