Page 91 - Docentes que transforman vidas que forman...

Seguramente te estás preguntando si es posible engañar el pensamiento
con el lenguaje, y la respuesta es que ¡Sí!, pero el engaño es contigo
mismo, pues el que te escucha, quien te conoce, quien te observa,
capta la congruencia o la incongruencia, percibe tu honestidad en lo
que piensas y expresas. Siente la armonía entre pensamiento, palabra
y acción. Nuestros estudiantes se dan cuenta de nuestra claridad y
transparencia, lo sienten y sincronizan con nosotros.

Actuar bien es la cereza del pastel, es el elemento en el cual se
visibilizan nuestros pensamientos y palabras mediante las acciones.
Supongamos que llegó a tu clase un estudiante nuevo que ha
cambiado constantemente de escuela, puedes pensar, qué enfado
o que será un reto para ti y que te esforzarás para que aprenda de
la mejor forma posible, también puedes pensar que es capaz de
aprender o puedes condenarlo diciendo lo contrario. Sin embargo,
lo que pienses forzosamente se verá manifestado en tus palabras,
¿qué le dices?, y, ¿cómo se lo dices?, pero también con tus formas
de actuación, con tus miradas, tus gestos, tu cercanía o lejanía, tu
empatía o indiferencia. Algunos ejemplos de las preguntas y su
impacto en el pensamiento, expresión y actuación se muestran en
la tabla 2.

Tabla 6. El principio de las tres B´s
Piense bien Hable bien Actúe bien
¿Qué pienso del ¿Me estoy dirigiendo ¿Cómo es mi actuar con
estudiante? con un lenguaje la/el estudiante?
adecuado con el
estudiantado?
¿Qué pienso sobre ¿Mis expresiones ¿Mi actuar le permite al
los sucesos de x o y faciales, corporales o estudiantado construir o
estudiante en la escuela? vocales son positivas o destruir?
negativas?
¿Cómo pienso que actúa ¿Mis palabras, gestos o ¿Mis formas de
x o y estudiante? expresiones construyen actuación son dignas de
¿Por qué razón pienso o destruyen? imitarse?
así?
Fuente: Santos (2023)

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