Page 106 - El magisterio y la vida en verso y prosa
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Una teoría digna de tomarse en cuenta




                                                         El cerebro es un “músculo” fácil
                                                         de engañar; si sonríes, se cree que
                                                      estás contento y te hace sentir mejor...
                                                       Dr. Juan Hitzig (gerontólogo)


               Hace casi dos meses que falleció mi televisor de muerte natural; tenía
            veinticinco  años  de  uso  ininterrumpido,  aunque  hace  unos  10,  sólo  en
            horario nocturno. Como consecuencia, mi acervo literario ha aumentado
            considerablemente pues, si bien soy lectora asidua desde siempre, a veces
            se encuentran en mis libreros revistas y libros que me han llegado por muy
            diversas vías, pero que mi dinámica vivencial me había impedido leerlos
            todos; algo que se está corrigiendo rápidamente en estos maravillosos días
            de asueto viso -electrónico.


            Pues  en  una  de  esas  revistas  tan  variadas  destaca  El  Boletín,  órgano
            informativo  de  la  asociación  de  pensionados  y  jubilados  de  la  UADY,
            del cual tengo varios números, aunque uno de ellos, que por cierto tiene
            en la portada a mi querida amiga Manuelita Pavía de Coronado, había
            permanecido engalanando mi mueble sin que hubiera podido leerlo; por
            angas o por mangas (¿Así se dice maestro Roldán?).


            Hace dos noches le tocó su tumo y me deleité con cada uno de sus artículos;
            lo mismo con los de contenido literario propiamente dicho que con aquellos
            de orden científico, pues afortunadamente están redactados a la altura de
            los cerebros estándar como el mío.

            Uno de éstos en especial me interesó profundamente, porque se refiere a
            nuestras células grises y se titula “El cerebro después de los cincuenta”.













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