Page 76 - Los objetos del poder
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aire, el globo era más compacto al igual que la canasta, haciéndolo más
rápido.
Para respirar debajo del agua, se creó una máscara que cubría toda la
cabeza, la cual se conectaba mediante dos mangueras, a unos tanques de
aire que se cargaban en la espalda, brazos y pies, los de los brazos y pies
eran muy pequeños, sólo eran de emergencia, si se agotaban los tanques
grandes de la espalda, eran una señal de que había que subir a la superficie
de inmediato, una manguera era para inhalar el oxígeno y la otra para
exhalar. Los tanques tenían unos flotadores muy pequeños, para disminuir
su peso, y brindarle mayor libertad para moverse a la persona que estuviera
bajo el agua, contrarrestando fuerza como si el buzo no trajera ese peso
extra.
Los trajes por su parte, eran dos diferentes; el primero, para resistir el
calor, su cubierta exterior terminaba en piel muy dura y gruesa que no era
conductora de calor, por dentro se constituía de otra capa de piel, seguía
otra y otra, cada vez más delgada, así seguía hasta que al interior del traje
existía un material que mantenía el frío, algo semejante a una hielera, se
podía verter en el traje agua fría o hielo, y a pesar de estar casi encima de
una fogata, la persona portadora podía permanecer casi una hora sobre
ella. Este traje era algo grande y tosco, dificultaba los movimientos al
tenerlo puesto, pero servía muy bien.
El segundo traje era para resistir el frío, tenía una tecnología interna
similar al traje de calor, sólo que éste en lugar de ser como hielera, era
de material muy resistente y conductor de calor, se podía verter dentro
de él carbón caliente, o cualquier cosa que durara a una temperatura
alta, sin que se dañase el traje en pocas veces de uso, por fuera era un
impermeable, podrías entrar a un lago congelado y el frío tardaría mucho
tiempo en penetrar y trasminarse hacia el interior, y el agua no pasaría
jamás; siempre se quedaría en el exterior manteniendo seco al portador,
a menos que algo filoso lo rasgáse, cortándolo y permitiéndole al flujo del
líquido adentrarse en el interior. Este traje no era tan estorboso y pesado
como el anterior, sino más esbelto y delgado, pero sumamente frágil ante
objetos punzocortantes.
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