Page 81 - Los objetos del poder
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ocupado con tareas lejanas a él y a su familia, con muchas personas a
su alrededor que lo vigilaban, sin que él supiera que sus compañeros de
trabajo, en realidad eran espías que lo vigilaban.
Transcurrieron algunos meses y Barto sintió que era el momento de revelar
la verdad a unas personas muy importantes, sus esposas; con todas tenía
una relación perfecta, llena de amor y confianza, ninguna era menos que
la otra, Barto se sentía pleno y feliz con cada una de ellas. A pesar de que él
era muy valiente, tuvo miedo del coraje y la furia que sus esposas pudieran
llegar a tener contra él, sabía que la anotación del libro, que hizo hace
muchos años, referente a sus siete esposas lo ayudaría, pero aun así tenía
temor ante las reacciones de ellas.
Mandó llamar a sus siete mujeres, Ánni, Scarlet, Dayana, Daysi, Rousse,
Bruu y Gely, ellas se llevaban muy bien entre sí, pero su esposo nunca las
mandaba llamar a todas juntas; eso era muy extraño y novedoso, al estar
reunidas y ver a su marido nervioso, con temor y muy diferente a como
se comportaba siempre, se empezaron a preguntar qué causaba miedo
e incertidumbre en el emperador de la gran alianza, ellas estaban muy
tranquilas, puesto no habían hecho nada malo, pero no se sentían cómodas
de ver temeroso a Barto, Bruu y Gely intentaron consolarlo animándolo,
mientras que a Dayana y Daysi les causaba algo de gracia la escena, las
demás sólo esperaban que Barto se calmara y comenzara a informarles el
motivo de la reunión.
Posteriormente todos tomaron asiento en una mesa redonda, Barto inhaló
hondo y comenzó la historia, les comentó de su viaje, cuando conoció a
cada una de ellas, de la cueva misteriosa, del libro del poder, de Aldebarán,
las reglas y algunas cosas más, pero omitió que las fecundó a todas en un
tiempo similar y que había moldeado a sus hijos desde antes de nacer con
ayuda del libro, eso podría ser imperdonable.
Al saber casi toda la información, Gely se molestó bastante, había usado
el libro a su favor y en contra de las siete reinas; Bruu también se enfadó
porque ella fue la séptima, en una situación normal no hubiera aceptado
una relación así, pero ya entendía porqué lo hizo, fue manipulada; Ánni tuvo
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