Page 64 - Las gañas del perro y otras historias del lado oscuro
P. 64
—Ellos me abandonaron. No me querían, nunca lo hicieron. Ya
fueron castigados por eso.
La mamá de Fanny entró en su recámara y colocó algunas de sus
prendas recién planchada en sus cajones y en su armario.
—¿Ya hiciste tu tarea amor?
—Después de comer la terminé.
—¿Quién vino a cenar esta vez?
—Godofredo y Carlota.
—¿Carlota?
—Sí, ella es mi nueva amiga. Está sentada allí, en esa silla.
Marisol vio en la dirección que le señalaba su hija y vio una muñeca
de trapo.
—¿De dónde salió esa muñeca?, —preguntó la madre de Fanny.
—Me la encontré —respondió Fanny un poco preocupada por
la reacción de su madre. —Señorita, dígame la verdad. Hemos
hablado de no tomar las cosas de los demás, ¿no es así?
—No la he robado, madre. Lo prometo. Me la encontré cuando
fuimos al panteón.
—Debe estar sucia.
—La limpié cuando llegamos.
—Ok, alguna niña debió tirarla por accidente. Deberíamos
limpiarla bien, mañana veremos. —Gracias, mami.
62

